Jueves, 14.03.02

Amanezco de vuelta en Argel decidido a zarpar rumbo a Mallorca. Tenía también la opción de navegar a Orán y desde esta ciudad argelina tan ligada por la historia a España poner rumbo a nuestra Península. Esta opción me hacía mucha ilusión por visitar el oeste de Argelia. Además era mucho más fácil porque suponía acortar mucho la distancia y navegar por el litoral. Sin embargo, significaba renunciar a pasar por mis queridas Islas Baleares que tanto me han enseñado de la mar. Hubiera sido traicionarlas un poco. Necesito ver las incomparables costas de Cabrera, Mallorca, Formentera.. Será una travesía difícil. Son 170 Millas Naúticas. Unas 12 horas de navegación a mar abierto sin ver costa. Es un rumbo Norte directo a Cabrera donde el mal tiempo representa un gran peligro. Me llaman desde España. Marcial Sánchez Barcaiztegui, ese marino de guerra español que tanto apoya a los amantes de la mar, está siempre pendiente de nuestra expedición. Desde Palma de Mallorca me transmite su preocupación por el tiempo. Me recomienda esperar. El parte metereológico en aguas de Baleares no aconseja zarpar. Hago caso de sus indicaciones, me armo de paciencia y veremos lo que pasa mañana.

 

Thursday, 14,03,02

I wake up in Algiers decided to weigh anchor course to Majorca. I also had the option to sail to Orán from this Algerian city so closed to the spanish history, to maintain course to our Peninsula. This option made me much illusion to visit the west of Algeria.Also it was much more easy because it supposed to shorten to much the distance and to sail by the coast. Nevertheless, it meant to resign to go through my dear Balearic Islands that as much have taught me of the sea. It would have been to betray them a little. I need to see the incomparable coasts of Goatherd, Majorca, Formentera.. It will be a difficult passage. They are 170 Nautics Miles. 12 hours from navigation on opened sea without seeing coast. It is a direct North course to Goatherd where bad weather represents a great danger. They call me from Spain. Marcial Sanchez Barcaiztegui, that Spanish military sailor who as much supports the lovers of the sea, is always pending of our expedition. From Palma de Mallorca he transmits his preoccupation.